domingo, 6 de abril de 2014

 
 
Soy indígena waiù del clan Epieyu, mi lugar sagrado panterramana (cementerio) se encuentra en wüìmpümüin Guajira Occidental. Mi madre nació en pozo hondo cerca de barrancas wopumüin, Guajira Oriental departamento de la Guajira , mi padre nació en Jiichu'oulu cerca de Nazaret(wüimpümüin, Guajira occidental, Departamento de la Guajira,  nací en el corazón de la ciudad de Maracaibo,Venezuela.
Mi nombre es Gloria Jusayu, tengo 45 años de edad. Soy activista social indígena desde hace mas de 20 años.
 Conocí a la directora Patricia Ortega a través del largometraje documental KATA O'U O'UTA (VIVIR-MORIR) como asesora y productora de campo. Participé en este documental, preocupada por tantas realidades que sufrimos los pueblos indígenas que hemos sido y seguimos desplazados de nuestros territorios por intereses de los estados, de gobiernos ,demilitares, de guerrillas, de paramilitares, del narcotráfico, de imposiciones de religiones de más de 500 años taladrando mentes para salir a la " civilización".

 ¿Quién se ha preocupado por contar sobre las torturas y desapariciones de comunidades indígenas en nuestro Continente? La respuesta es dura: ¡Nadie!
La impunidad ha ganado, lo más grave: para la mayoría, estos grupos indígenas ni siquiera existen. O lo peor, no son importantes.

 Pero hoy en día, nosotros, junto a una nueva generación de indígenas y aliados alijunas (no indígenas), sensibles, comprometidos, queremos narrar, a través de la investigación y la recreación audiovisual, las más dolorosas situaciones que hayan vivido nuestras comunidades. Igualmente queremos resaltar la belleza de la espiritualidad, los valores que hacen que amenos a nuestras tierras por encima de cualquier maldad.
Sobre la masacre de Bahía de Portete, en Venezuela, en mi región (El Estado Zulia) fuimos los comunicadores waiú y alijuna, los que investigamos y recibimos a algunos desplazados que llegaron a un barrio en el oeste de la ciudad de Maracaibo, y mis colegas periodistas, todos los días escribían grandes reportajes sobre esta desgracia que entristeció y marcó al pueblo waiú.
Nos acercamos a estos hermanos y le hablamos de nuestro documental:VIVIR –MORIR, invitándolos a participar y a compartir sus experiencias, y ellos muy gustosamente aceptaron, les pareció excelente esa iniciativa de hacer conocer el hecho horroroso que vivieron. Cuando el documental estuvo listo y pudieron apreciarlo dijeron:“ojalá esto llegue lejos y se conozca la maldad que nos hicieron” Y así fue, pues KATAA-OU OUTA FUE LA INSPIRACIPÓN QUE DIO ORIGEN AL LARGOMETRAJE DE FICCIÓN “EL REGRESO”.
Patricia Ortega, ya tenía documentos en sus manos sobre Portete, a través de testimonios,reportajes, entrevistas en los medios impresos como los diarios: Panorama y La Verdad. Estando yo en una organización de mujeres binacional wayuu, conocí por primera vez a las hermanas waiù Telemina Barros y Débora Barros, abogadas que lideran las denuncias sobre los hechos acontecidos en Portete en Colombia y a nivel internacional.
En ese momento nosotras las waiù del lado venezolano quisimos también que narraran esos testimonios en las comunidades y en espacios de encuentros masivos como las universidades. Ellas formaron parte de esta organización de mujeres waiù junto a nosotras las waiù del lado venezolano. Fue grato conocerlas y tenerlas tan cerca, era nuestra oportunidad de entender más sobre la masacre ya que ellas socializaron y socializan la denuncia.
Le comenté personalmente a las hermanas Barrosde película de ficción “El REGRESO”.Les informé que yo era la productora de este film, que estábamos en plena preproducción de la obra y que Patricia Ortega, la directora, deseaba reunirse con ellas para hablarles de éste proyecto audiovisual.Las llamé varias veces por teléfono, preguntándoles cuándo nos podían atender o atenderme para comentarles sobre el pronto rodaje y hasta les pedí participar en el encuentro que se realiza allá en Portete(YANAMA), pues nuestro propósito era invitarlas a que participaran en él. Pero nunca me dieron una audiencia o un espacio. Siempre me decían:Gloria es que mañana o la próxima semana me voy de viaje para Bogotá o para Europa o para Estados Unidos” …
Yo le informaba a la directora que lamentablemente, no había podido establecer contacto con las hermanas Barros. Mi última insistencia se llevó a cabo, cuando fui a buscar el informe:“Masacre de Bahía Portete, mujeres wayuu en la mira”, en su presentación realizada en la Casa de Cultura de Riohacha.Debí pernoctar en el hogar de la señora Carmen Fince, Madre de Telemina y Débora Barros, nuevamente intenté conversar con ellas y la respuesta fue indiferencia, les informé sobre el rodaje de la película EL REGRESO, pero las hermanas no mostraron interés al respecto. Me devolví a Maracaibo decepcionada, por no contar con su atención o apoyo para esta obra audiovisual, porque esa masacre no es sólo de un grupo de personas ajenas, es de todos nosotros, los waiù sensibles, que tenemos años caminando en la socialización de la persistencia de nuestra identidad, de nuestra espiritualidad y de nuestros territorios acechados, penetrados, humillados desde las armas.

 Entonces ahora, me sorprende leer unas notas como estas:
Que esta comunidad no fue consultada antes de filmar la película ni
durante su producción. Dicen que la vieron a través de otras fuentes y
no de tu persona. Esto alude a la vulneración del Derecho a Consulta,
expresado en las constituciones y documentos jurídicos que amparan a las
comunidades indígenas”.


 Que la película puede afectar su proceso de retorno y de reparación
integral de las víctimas, que están adelantando ahora”.

*Que la película puede causar estigmatización en la comunidad y
afectación psicológica”

*Que la gente de Portete no quiere recordar tan crueles sucesos y la
película muestra escenas muy fuertes”.

* Rechazan expresamente el auspicio de ACNUR a la película” (Frases citadas por ACNUR VENEZUELA, de una denuncia recibida y por la cual esta institución retiró su apoyo al film de manera abrupta)

 me sentí muy mal e indignada al leer esto.

busqué el contacto ético y responsable con esta líderes, como enlace vital como productora de la película EL REGRESO, para trabajar en conjunto y en colectivo, al no recibir interés ni respuesta, nos dispusimos a trabajar con las comunidades que si apoyan y siguen apoyando este proyecto, hecho desde la honestidad.
soy una waiù como estas hermanas líderes, por eso me asombra que afirmen que no fueron consultadas, cuando realmente si se hizo un contacto con ellas, y fueron ellas las que no tuvieron el tiempo ni el espacio para concretar una alianza.

La mayoría de los waiù han expresado su satisfacción ante esta película EL REGRESO, porque al fin se va ver una ficción sobre sucesos que pasan en comunidades indígenas. Para no olvidar, para dejar a un lado la impunidad, no sólo yo, sino más de 30 hermanos waiú trabajaron como actores y actrices en este film, entregados a expresar su amor y compromiso con nuestro pueblo.
Me extraña que en estos momentos Las hermanas Barros, no me han escrito, pidiéndome explicaciones o alguna información. Ellas me conocen, somos hermanas, y desde el equipo de producción siempre hemos estado abiertos a la conversación.

 La película EL REGRESO ya está terminada, y las invitamos a ellas y a todos, para que la disfrutemos y reflexionemos junto a ella en colectivo.

ANASÜSA WACHAJALE JUKUA’IPA TÜ WANTANAJIRRAIN TAWALAYUIRRUA JUCHIRRUA TU ALATAKA “

PIENSO QUE ES PREFERIBLE BUSCAR LA MANERA DE ENCONTRARNOS A TRAVES DE LO SUCEDIDO

 GLORIA JUSAYU

Activista indígena, Periodista y realizadora
Maracaibo, miércoles 3 de julio de 2013